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Mostrando las entradas de septiembre, 2005

Peculiaridades

(I) "I have kids. Please help me." Así rezaba el cartón apoyado contra la cadera de la mujer mendicante. Por extraño que parezca, la mujer estaba sentada a la entrada de la catedral metropolitana, actuando su papel de atracción turística for export. Por supuesto, similares explicaciones en argento ornaban parecidos cartones situados al lado del primero. (II) Viajando hacia J.M.Moreno en un subte de la línea E, de pronto el tipo vio una formación que circulaba por la otra vía. Contra toda lógica, iba en la misma dirección que la formación en que viajaba el tipo, aunque a velocidad menor. Peor aún, cuando la formación en que viajaba el tipo arrancó de la estación en la que se detuvo luego de adelantarla, la otra, por la otra vía, llegó y se detuvo lo más pancha junto al andén contrario. Así perdió el tipo una de las certezas que constituyen la seguridad cotidiana de circunstancias que, de otra forma, serían imposibles de afrontar: que los subtes no circulan de contramano.

Etiamsi omnes, ego non (III)

Yo no se si usted lloró de impotencia alguna vez, si odió su ser alguna vez por prohibirle la sonrisa. Yo no se si usted odió queriendo alguna vez, si quiso y fue ciego, si le atrajeron los diez pisos que nos separan desde el suelo o tuvo miedo. Yo no se si escuchó a moris o vio belleza o dio tristeza alguna vez. Yo no se si alguna vez a sus amigos los necesitó, pero no le alcanzó; si soñó alguna vez, si escuchó "Basta" alguna vez, si se tragó una pared y después, nada. Yo no se si sus problemas se olvidaron o se acostumbraron, si vio pureza entre su cuerpo y el de ella alguna vez si se durmió abranzando a alguien sin quererse despertar, si comprendió que "dos" es muy difícil de lograr, si buscó sin encontrar, si vio el mar alguna vez si apretó una mano y se quedó callado, si encontró una mirada alguna vez, si estuvo en paz y con felicidad, si en la fuerza de un abrazo quiso demostrar lo que sentía y apretujó un cuerpo frágil. Yo no se si no encontró sentido alguna

Katrina

Para quienes se dedican a autoflagelarse con monsergas del tipo "cómo somos los argentinos, eh...": No me jodan más con "la gran democracia del norte", o la supuesta superioridad civilizada de los norteamericanos. Cuando empezaron a verse las primeras imágenes dantescas, un cumpa de laburo incluso me dijo "mirá, y eso les pasó a ellos. Imaginate lo que hubiera sido acá...". Yo me quedé mirándolo sorprendido y le dije que en Santa Fe, sin ir más lejos, no pasó ni una fracción del desastre social y humano que se vio en Nueva Orleans. Como dice Atilio Borón en esta nota de P/12 de hoy: "En muchos países del mundo desarrollado han ocurrido catástrofes similares a la del Katrina, como en Japón, con el terremoto de Kobe, y lo que invariablemente ha ocurrido fue un florecimiento de la solidaridad social. En los Estados Unidos, en cambio, la profunda patología social de ese país produjo el efecto contrario: un feroz “sálvese quien pueda” que generó saqueos